Esta semana pensaba en hablar sobre el día de la enfermera, parece que siéndolo yo, era lo que tocaba, que para eso tenemos un día al año de postureo y visibilidad, rodeados de videos estupendos que invitan a la lágrima fácil y a ponernos alitas de angel y areolas de santo, con muchas sonrisas y empatía a raudales, que es lo que vende.
Sin embargo sencillamente… no tuve tiempo, y sobre eso quería hablar:
Soy enfermera, en este momento directora de enfermería y responsable de calidad e innovación, pertenezco a ANE como socia fundadora y soy socia de AEA, de ANDE y de SEDISA, acabo de terminar un curso sobre gestión por procesos, estoy acabando uno sobre gestión de recursos humanos y a finales de mes inicio otro sobre aspectos ético-legales de la responsabilidad en Enfermería, y todo sencillamente no por tirarme ahora el moco y posturear en las redes, sino porque me preocupa mi profesión, reivindicando lo que considero es justo para ella y porque soy responsable con el puesto que ejerzo y considero que tengo que estar al día lo más que pueda. ¡Ah! y además, muy además, soy MADRE, como dice mi bio, soy Mujer, Madre y Enfermera.
Sin embargo, en este mundo en el que vivimos, alguien como yo, que no soporta los baremos positivos antidiscriminación (valgo lo que valgo y no por tener la pata más larga de un cromosoma quiero que me regalen nada) quizá no tenga todas las puertas abiertas que debiera, si mi condición fuera otra, y no solamente por mi género.
En la empresa en la que ahora trabajo, si soy hombre, mujer o si arrastro 20 títulos o 50 les da bastante igual. Solo quieren a alguien formado, con una actitud positiva y sobre todo ganas de trabajar, y ahí estoy , enamorada de mi trabajo y dándolo todo, porque me apasiona y me encanta.
¿Y por qué en la empresa pública esto no pasa? ¿por qué no hago más que ver que los líderes -formales- de mi profesión son siempre varones? ¿por qué siento que da un poquito lo mismo lo que sepas, lo que valgas y lo que estés formado, si al final lo que más pesa es (como os contaba en mi anterior post) la afinidad política y por qué no decirlo, el género del representante?
No tengo tiempo, es una de las frases que más repito últimamente, no tengo tiempo… porque lo quiero todo, como dice el título del post, y porque lo quiero ya.
Puede que para muchos esa frase, título de la canción de Queen que os pondré al final del post, sea codicia, pero desde mi punto de vista, no es más que justicia.
El día que las mujeres nos incorporamos al mercado laboral nos vendieron una moto de igualdad, que no tiene ruedas, porque no es cierto, no somos iguales. Ya no es un tema de género, es un tema de personas, porque unos necesitamos ver todos los días a sus hijos, nos duele decirles «déjame que tengo que trabajar/estudiar/entregar este proyecto«, nos duele perdernos de llevarle a la piscina o de pasar una tarde pintando y jugando con sus trenes… a otras personas quizá eso no les importe.
No quiero renunciar a nada, e insisto, no es avaricia, creo que simplemente es justo que así sea, ¿por qué tengo que elegir entre mi trabajo y mi familia? son diferentes facetas de mi misma, y sin una de ellas estaría incompleta.
Creo que es justo quererlo todo, y lo lógico es quererlo YA, porque estamos en el siglo XXI aunque a veces no lo parezca, y nosotros mismos nos pongamos trabas a la conciliación.
Ayer hablando con unas amigas, me quejaba de que las reuniones del cole las pusieran siempre a las dos de la tarde y advirtieran expresamente que a ser posible no llevásemos a los niños… y me decían que claro, que son funcionarios públicos, que tienen un horario y que no van a poner una reunión a las cinco porque a mi me venga bien… ya… eso se lo dicen a una enfermera, que estamos toda nuestra vida 365/24h que como otras profesiones de atención contínua (policías, bomberos, médicos, TCAEs…) nos perdemos días especiales, festivos, noches, cumpleaños y recitales… para que le venga bien a otras personas ser atendidos.
El mundo tiene que pegar una vuelta, solo entre todos podemos arreglarlo.
Yo Soy Enfermera, y lo quiero todo, lo quiero ya.
Os ruego escuchéis este tema de Queen, y lo veais como si de quien habla es de una enfermera… que camina por las calles (hospitales) de puntillas, luchando… gritando y sin tiempo para dudas. No, no es mucho pedir no… lo queremos todo y lo queremos YA.
Enhorabuena Mónica, una entrada genial muy inspiradora.
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Una magnífica entrada, Mónica…
Me encantas, eres una gran profesional y una magnífica comunicadora; tus entradas son sencillas y humanas; te honra el manifestar estas dudas, estas inseguridades con respecto a no llegar a todo por no querer renunciar a nada. Pocas personas están dispuestas a tanto esfuerzo para conseguir a veces tan poco… (hablo por mí, la verdad 😦 ) y que veamos que a nuestro alrededor no todo funciona al ritmo de nuestro esfuerzos. A nosotros se nos exige lo que a otros se les disculpa…
Insisto, una magnífica entrada.
Besos miles, querida mía.
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Decir lo que se piensa es tan sencillo como lo fácil que sea pensarlo… Lo complicado es por tanto llegar a esa reflexión, a descargarse de culpas y darse cuenta de que no se pide nada que no sea obvio. Los profesionales en este país, TODOS, hombres, mujeres de cualquier profesión deben continuamente escoger.
Y a mi no me da la gana escoger, prefiero ser una «malamadre» imperfecta, desarreglada, temperamental, desesperada y apasionada, pero ser una madre FELIZ, porque también soy una profesional. Eso mi hijo lo va a percibir mucho mas que si estuviese a su lado todo el día pero con la mitad de intensidad.
Al fin y al cabo, cuando me dice… «mamá , te quiero» se que estoy haciendo y defendiendo lo correcto.
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